Os invito a que leáis esto del blog de Tenemos Tetas.
Sin más.
Y después, os invito a reflexionar.
“(…) no devenimos madres necesariamente cuando parimos al niño, sino en el transcurso de algún instante de desesperación, locura y soledad en medio de la noche con nuestro hijo en brazos. Cuando la lógica y la razón no nos sirven, cuando nos sentimos transportadas a un tiempo sin tiempo, cuando el cansancio es infinito y sólo nos resta entregarnos a ese niño que expresa nuestro yo profundo y no logramos acallar, entonces nuestra madre interior ha nacido.”
Yo solo te puedo confesar que he vivido peleada con las mías toda mi vida. Me han costado vergüenza, falta de autoestima y lágrimas. Pero llegó la maternidad y aun siendo para otros esa maternidad me ha reconciliado con ellas.
ResponderEliminar